El calor es requerido para calentamiento y también para algunos procesos industriales. Dicho calor es transportado desde una caldera a un punto para su uso mediante medios como agua, aceite o vapor empleando los principios de transferencia de calor.
Considerando que, entre el 40 y 60% de toda la energía empleada por algunas industrias, es consumida para la generación de vapor, la operación eficiente del sistema y su mantenimiento adecuado pueden representar una gran oportunidad para disminuir sus insumos energéticos y, por ende, sus costos de operación.
Existen reglas que, en general, deben seguirse para generar vapor con eficiencia:
SISTEMAS DE ALIMENTACIÓN Y TRATAMIENTO DEL AGUA PARA LA CALDERA
ü Mantener en operación el mínimo número de bombas, según se requiera
ü Mantener la operación de las bombas produciendo la presión de descarga de diseño
ü Aprovechar el flujo por gravedad, siempre que sea posible
ü Si los requerimientos de presión varían considerablemente por los cambios de estación en el año o en la producción,
ü Evaluar la posibilidad de cambiar los impulsores de las bombas
ü Usar dispositivos para variar la velocidad en los motores de las bombas de agua de alimentación
ü Dar tratamiento al agua de alimentación y agua retornada (condensado).
ü El agua cruda, que forma parte de la alimentación a la caldera, deben
eliminarse los sólidos en suspensión, reducir “la dureza” (provocada por las sales de calcio, magnesio y silicio) y eliminar otras impurezas solubles.
ü Aplicar productos químicos, para eliminar el oxígeno disuelto en el agua y controlar su grado de acidez.
ü Dar tratamiento a los condensados que retornan.
ü Purgar adecuadamente la caldera, para limitar la concentración de impurezas
del agua en la caldera.
QUEMADORES Y HOGAR DE LA CALDERA
Alimentación de combustible gas
ü Mantener, en el nivel adecuado, la presión de suministro al quemador.
ü Las variaciones de presión del gas tienen su origen en la presión del suministro general, es decir, de la válvula de control de presión de la caldera, pero también pueden deberse a defectos o suciedad en el regulador de presión del gas a la entrada de los quemadores.
ü Verificar la operación correcta de la válvula que modula el gas, para asegurar que responda a las señales provenientes de los controles.
ü Comprobar que la presión del gas en la boquilla (tobera) sea la correcta; esto se verifica a través de la medición de presión en los manómetros indicadores locales.
Alimentación de combustible líquido
ü Verificar la fluidez del sistema de recirculación de combustible.
ü Mantener, en el nivel adecuado, la presión de suministro del combustible.
ü Los combustibles líquidos necesitan un medio de atomización, que puede ser aire o vapor, según su disponibilidad.
Suministro del aire adecuado para la combustión
ü Evitar el exceso de aire.
Tabla 1. | |
Exceso de Aire Recomendado | |
combustible | Exceso de Aire Recomendado (%) |
Gas natural | 5-10% |
Propano | 5-10% |
Gas de coque | 5-10% |
Combustóleo (FuelOil 6) | 10-15% |
ü Ajustes de exceso de aire en la especificación de quemadores, de acuerdo con la temperatura del aire de combustión.
ü Evitar infiltración de aire.
ü Verificar la operación de la compuerta de aire, para asegurar que responda correctamente a las señales provenientes de los controles.
ü Ajustar la relación de aire/combustible para la operación más eficiente, conforme a la carga de operación en la caldera.
Asegurar la operación adecuada de los quemadores
ü Mantener limpias las boquillas de los quemadores.
ü Ajustar, mediante un quemador tipo modulante, las condiciones de demanda en calderas con un solo quemador.
ü Ajustar los quemadores en operación de acuerdo con las variaciones de carga.
ü Revisar periódicamente las condiciones de operación de los quemadores.
ü Revisar que no exista infiltración de aire en los ductos de gases de combustión.
ü Controlar los quemadores de acuerdo con las especificaciones del fabricante.
ü Ajustar los dispositivos de detección de flama.
ü Cuidar la posición de las compuertas de regulación.
ü Eliminar las pérdidas de calor.
ü Ajustar el "tiro" en el piso de la caldera
ü Ajustar el exceso de aire al nivel recomendado por el fabricante del quemador
ü Mantener limpias las superficies de intercambio de calor
ü Recuperar el calor de los gases de chimenea (donde se justifique)
ü Controlar la infiltración de aire
ü Instalar economizadores.
ü Instalar precalentadores de aire.
BDiaz
